jueves, 30 de noviembre de 2023

Literatura, sociología y memorialismo en el mundo del fútbol

 Hace pocas semanas en su podcast de Aceprensa sobre libros, Helena Farré mencionaba la relación entre el deporte y la literatura y ofrecía una sugerente lista de libros de calidad dedicados a varios deportes. También algunos amigos muy aficionados al fútbol me han pedido algunos títulos de libros que se centren en el deporte rey.

Aunque parezca mentira, no existen muchos libros que aborden de manera costumbrista, sociológica y literaria este deporte, aunque algunas editoriales españolas, como Córner y Libros del K.O., se han especializado en publicar libros sobre fútbol. 



Abundan las biografías, los libros técnicos y algunos ensayos con muchas dosis de memorialismo sobre determinados equipos de fútbol. Lo que más se publica, por desgracia, son biografías de encargo de futbolistas famosos, libros hagiográficos que cuentan sin empacho las exitosas andanzas de determinados futbolistas que han alcanzado un prestigio mítico, nacional o internacional, o reportajes periodísticos sobre cuestiones de actualidad, jugadores o presidentes de moda y diferentes efemérides. En esta línea, por su sinceridad y su punto de vista a contracorriente, merece citarse A pie cambiado (El Paseo Editorial), las memorias del exfutbolista de la Quinta del Buitre Miguel Pardeza. 


            

En las recopilaciones de libros sobre el fútbol desde una perspectiva literaria suele citarse siempre Fiebre en las gradas (Anagrama), de Nick Hornby, novela muy amena, realista y conseguida. Luego hay novelas que sitúan su contexto en el fútbol, aunque después aborden otras cuestiones, como Tres actos y dos partes (Anagrama), del italiano Giorgio Faletti. Y también hay novelas que escriben sobre algunos hechos futbolísticos más o menos heroicos, como sucede en la novela de J.I. Carr, Cómo llegamos a la final de Wembley (Tusquets), que novela las andanzas de un equipo modesto que alcanza cotas inimaginables. 



También merece citarse la antología Cuentos de fútbol, a cargo de Jorge Valdano, que apareció en un momento en que las cuestiones futbolísticas tomaron, desde fuera, un interés especial y hasta intelectual. De lo publicado en los últimos años hay que destacar el pasional libro de Galder Reguera, Hijos del fútbol, reeditado recientemente por Seix Barral, y la biografía Retrato del futbolista adolescente (Periférica), de Valentín Roma, libro en el que su experiencia como futbolista ocupa un lugar muy especial. En estas listas no faltan los libros de Eduardo Galeano, como Cerrado por fútbol (Siglo XXI).



Hay que citar, además, las interesantes crónicas de Bill Buford sobre el submundo de los ultras que aparecen en Entre los vándalos (Anagrama) y los divertidos artículos que han escrito algunos periodistas contemporáneos, como los del desaparecido David Gistau recogidos en El penúltimo negroni. Reconozco que en mi caso, sin ser ningún experto en el futbolibro, he disfrutado con libros sencillos, poco conocidos, pero muy auténticos, como La Pasión según San Mamés, del periodista José María Mardones, y con una biografía novelada del periodista Daniel Entrialgo dedicada al húngaro Puskas, delantero que hizo historia en el Real Madrid y que se exilió de su país después de la invasión de Hungría por parte de las tropas soviéticas en 1956. Sé que en esta enumeración faltan muchos títulos.


            Más que literatura en estado puro (los que he leído no me han convencido mucho), en los libros en los que el fútbol es protagonista busco mucho de sociología, algo de costumbrismo y sus buenas dosis de antropología. No resulta un género fácil, pues el fútbol, quizás por su cotidiana omnipresencia y su avasallante información, acaba siendo un deporte demasiado cercano, donde uno conoce al dedillo sus grandezas y también sus muchas miserias. En el fondo, los aficionados al fútbol, entre los que me incluyo, somos de todo un poco: ultras, entrenadores, árbitros, comentaristas y hasta médicos… 


         

   Por eso quiero destacar especialmente dos libros recientes que ya ha reseñado en este blog. El primero, Rayografía (Debate. 2023. 392 págs.), del escritor y guionista Nicolás Casariego (Madrid, 1970), es un libro sobre el Rayo Vallecano y mi barrio, Vallecas, que además resulta una interesante indagación en muchas de las facetas que rodean el mundo del fútbol, del que ya sabemos que es mucho más que un deporte.



            Y el otro libro es Subcampeón (Libros del K.O. 2023. 360 págs.), las entretenidas memorias de Zuhaitz Gurrutxaga, exjugador de la Real Sociedad y ahora dedicado al mundo del espectáculo. En el libro también ha colaborado el escritor Ander Izagirre.

 

jueves, 23 de noviembre de 2023

"Subcampeón", de Ander Izagirre y Zuhaitz Gurrutxaga

 


Cuando Zuhaitz Gurrutxaga, exjugador de la Real Sociedad, se planteó escribir un libro sobre su vida pensó desde el primer momento en pedirle al escritor Ander Izagirre que le echase una mano. A Izagirre le entusiasmó el proyecto y entre los dos, a cuatro manos, han escrito este libro muy entretenido que combina las experiencias personales vividas por Gurrutxaga, algunas dolorosas, con muchísimos pasajes y anécdotas divertidas y hasta desternillantes que tienen que ver con su etapa como futbolista.

            Natural de Elgoibar, fichó por la Real Sociedad con trece años. A los dieciséis debutó en las categorías inferiores de la selección española y llegó a ser internacional en la sub-21. En el año 2000, con diecinueve, debutó en Primera División con el primer equipo. Militó durante varias temporadas y fue subcampeón de la Liga en la temporada 2002-2003. Más tarde siguió jugando en diferentes equipos de segunda y tercera división (Algeciras, Rayo Vallecano, Real Unión, S.D. Lemona, Zamora) hasta su retirada en el Beasain. 

Tras colgar las botas, se ha dedicado al mundo del espectáculo. Ya como jugador empezó a componer canciones que tenían que ver con su vida amorosa y sus actividades futbolísticas. En sus actuaciones, empezó a presentar sus canciones con un monólogo que solía levantar carcajadas. Llegó un momento en que se decidió por preparar un monólogo más largo, con el que obtuvo un increíble éxito. A partir de ahí, Gurrutxaga ha continuado con sus espectáculos en directo, además de ser actor, cantante y presentador de programas televisivos. 


Pero su vida no se traduce en un maravilloso y envidiable viaje al éxito futbolístico. Como escribe, “creo que preferiría no haber llegado nunca al fútbol profesional, porque cuando se cumplieron todos mis sueños mi vida se convirtió en infierno”. Y es que Gurrutxaga empezó a padecer en sus años como jugador de la Real Sociedad serios problemas mentales que derivaron en un progresivo Trastorno Obsesivo-Compulsivo (TOC) que se manifestaba tanto en su vida privada como en su desempeño como futbolista. Gracias a su madre, acudió a una psicóloga y desde entonces asimiló y encarriló la enfermedad. 

Con el paso de los años, ha conseguido mantener una higiénica distancia sobre estos hechos que le ha permitido reírse de sí mismo y de sus manías y obsesiones y que, también, ha convertido en sustancia narrativa de sus espectáculos, donde habla también de su trayectoria como futbolista con mucha sorna y con anécdotas descacharrantes. Durante la lectura del libro, he soltado bastantes veces la carcajada.

Este es, precisamente, el tono de este libro, que Ander Izagirre ha sabido modular perfectamente alternando las dosis de momentos y reflexiones serias, como los referidos a su enfermedad, con anécdotas que describen de manera juerguista sus años como futbolista en equipos tan distintos.



Hay muchos momentos inolvidables de sus actuaciones futbolísticas. Por ejemplo, su relación con Javier Clemente cuando fue entrenador de la Real Sociedad. O los marcajes marrulleros que realizaba en sus temporadas en el Zamora y Real Unión; o el año que pasó en el Rayo Vallecano cuando este equipo jugaba en Segunda B: “De lo único que me arrepiento en toda mi carrera deportiva -dice Gurrutxaga en el libro- es de no haberme esforzado más por seguir en el Rayo Vallecano, el equipo más especial que he conocido, el más divertido, el más popular, no sé cómo explicarlo”. Se agradecen estas palabras.

Personalmente, me han parecido muy amenas las páginas dedicadas a contar los entresijos del mundo del fútbol sin ponerse ni grave ni metafísico: la relación con sus compañeros, los entrenamientos, las vacaciones que pasa con otros futbolistas, los entrenadores que tuvo (como Toshack o Javier Clemente, entre otros muchos), el trato con la afición, anécdotas de los vestuarios y de las concentraciones, las peculiaridades de algunos futbolistas extranjeros…



Los pasajes dedicados a describir su enfermedad participan de esa variedad de tonos: se pasa de las observaciones serias a los golpes cómicos, a veces sin transición. Con el paso de los años, además, predomina en su caso la visión hilarante de aquellas manías y obsesiones. También destaco del libro los comentarios que hace sobre su vida doméstica y familiar, sus amigos de Elgoibar, sus juergas, sus novias… 

Excelente libro, pues, que cuenta una historia muy entretenida e interesante y que, además, está muy bien escrito. Se nota, y mucho, la mano de Ander Izagirre (San Sebastián, 1976), premio Euskadi de Ensayo 2023 por Una vuelta al país de Elkano y autor de otros libros sobre viajes, como Los sótanos del mundo,  de ciclismo (Plomo en los bolsillosCómo ganar el Giro bebiendo sangre de buey), además de reportajes como Potosí, sobre la vida de los mineros bolivianos.



Subcampeón

Ander Izagirre y Zuhaitz Gurrutxaga

Libros del K.O. Madrid (2023).

360 págs. 22,90 €.