Tras el éxito
de El Proyecto Esposa, traducida a
más de 30 idiomas y de la que se han vendido más de un millón de ejemplares,
vuelve el autor australiano a convertir a Don Tillman en el protagonista de su
continuación, El Efecto Matrimonio.
Al
igual que en la novela anterior, los mayores aciertos de la novela son el
carácter y las reacciones de Don, un persona que tiene algunos rasgos del
Síndrome de Asperger. Don es metódico hasta la extenuación: vive dominado por
un impulso de organizar todo desde un punto de vista científico, amante del
orden y de la comprobación empírica de todas las situaciones, también de los
sentimientos. Como escribe de sí mismo, Don, que vuelve a ser el narrador: “soy
muy consciente de que no todos entienden lo mucho que valoro la planificación y
lo poco que permito que nuestras vidas sigan un rumbo impredecible basado en
acontecimientos aleatorios”. Don es consciente de que por culpa de estas
obsesiones, tiene pocas habilidades para la interacción social.
El
autor aprovecha literariamente al máximo estos rasgos del carácter de Don. En
la anterior novela, El proyecto Esposa,
su argumento se centraba en el proceso racional y técnico para conseguir
casarse. Ahora, el hilo conductor es la noticia de que Rosie, su mujer, se
encuentra embarazada. A partir de ese momento Don aplica sus impresionantes
conocimientos técnicos al desarrollo del embarazo y cómo puede afectar este
estado a su mujer. Don controla los planes, las actividades, la vida social,
los ritmos de trabajo y, sobre todo, la alimentación de Rosie. A la vez, se
prepara científicamente para ser padre, lo que provoca constantes situaciones
cómicas que el autor utiliza para complicar el argumento con escenas imprevisibles
que ponen en peligro la relación entre Don y Rosie.
A
su alrededor, vuelven a aparecer los amigos de Don y Rosie de la primera
novela, todos ellos profesionales ya maduros y consagrados y miembros de la
comunidad universitaria, como Don y Rosie. Todos ellos están habituados a la
manera de procesar la información vital de Don y con sus aportaciones contribuyen
a complicar todavía más las cosas.
Al
tratarse de una continuación que utiliza los mismos mecanismos y las mismas
reacciones, todo es, en esta ocasión, más predecible. Aunque la finalidad es
cómica y el humor es limpio, aparecen algunos detalles de humor un poco gruesos
y también algunas referencias a situaciones morales muy contemporáneas en las
que el autor opta por la visión políticamente correcta.
Don
sigue siendo, como en la primera novela, un personaje hilarante y entrañable. A
pesar de su inexperiencia vital, sus lógicas reflexiones sobre la paternidad y
su científico deseo de hacer las cosas bien provocan constantes momentos
ridículos y humorísticos en los que se destacan algunos valores humanos como la
amistad y la comprensión. Es cierto que la novela no tiene la misma novedad y
frescura, pero a pesar de todo se lee muy bien y aumenta el cariño por Don
Tillman, profesor de Universidad especializado en Genética, radical enemigo de
las incertidumbres.
El Efecto Matrimonio
Graeme
Simsion
Salamandra.
Barcelona (2015)
384
págs. 18 €.
T.o.:
The Rosie Effect.
Traducción: Magdalena Palmer.
Traducción: Magdalena Palmer.
Para mí en El proyecto esposa Don es el personaje fundamental, sin él toda la trama se quedaba en agua de borrajas. Es un personaje que está muy bien retratado, pero no sé si me animaría a leer esta continuación.
ResponderEliminarUn abrazo