Recupera
Libros del Asteroide este libro ya publicado en España en la década
de los ochenta, antes de la muerte de su autora, Beryl Markham,
nacida en 1902 en Inglaterra y fallecida en Kenia en 1986. Beryl
vivió desde los cuatro años en el África oriental, en una granja
en Njoro, cerca del valle del Rift. Cuando su madre y un hermano
abandonaron Kenia, ella permaneció con su padre hasta 1936, año en
el que finalizan estos recuerdos. Posteriormente, vivió en Estados
Unidos –donde publicó en 1942 este libro- y en Inglaterra, y en la
década de los cincuenta regresó a África, donde vivió hasta su
muerte.
En 1937, Karen Blixen
había publicado Memorias de África, libro que transcurre en
los mismos escenarios que Al oste con la noche y casi con
protagonistas parecidos, pues Beryl Markham compartió amistad y
aventuras con el barón Von Blixen, Tom Black y Lord Delamere. Aunque
el de Blixen contiene también sus experiencias personales, el
tratamiento es más narrativo y literario que el de Marckham, un
libro más directo, personal e intuitivo.
Al oeste con la noche
contiene algunos recuerdos y evocaciones de África por parte de una
mujer identificada plenamente con la vida en aquellas tierras. “De
niña –escribe- me pasaba días enteros con los muramis nandis,
cazando descalza en el valle de Rongai o en los bosques de cedros de
la escarpadura deMau”. Beryl comparte amistades, juegos y vivencias
con los nandi, kavirondo, masai y kikuyus. Pronto aprende a cazar
jabalies. Le encantan los animales. Tiene un perro, Buller, que
es todo un personaje. También se dedica a criar y entrenar caballos.
Cuando, tras arruinarse, deben abandonar la granja familiar, Beryl se
traslada con diecisiete años a Molo para trabajar como entrenadora,
mientras su padre viaja hasta el Perú para emprender nuevos
negocios. No lleva Beryl una vida regalada; debe de trabajar, y
mucho, para poder sobrevivir.
La relación que tiene
con los caballos, familiar, íntima, ocupa varios capítulos. En
ellos habla del carácter de Camciscan, un caballo traído
desde Inglaterra que no puede controlar sus prontos agresivos; y
también de Wise Child, una yegua con problemas en los
tendones que gana una de las más importantes carreras, tras un
brillante entrenamiento. O el nacimiento de Pegaso, su
caballo, tras el parto de Coquette.
Junto con los caballos
su otra gran pasión fue la aviación. Beryl abandonó su carrera
como adiestradora para ser una brillante piloto en unos tiempos
pioneros y complicados. Muchas de las aventuras que cuenta y las
personas con las que se relacionó tienen que ver con su trabajo como
piloto. El libro acaba con un capítulo, ya de regreso a Inglaterra,
en 1936, tras un viaje lleno de percances, en el que describe el
histórico vuelo que realizó en solitario sobrevolando el Atlántico.
Resulta muy emotivo el
trato que tiene con algunos de sus empleados y con miembros de las
tribus con las que convivió –Arab Ruta, Arab Maina, Bishon Singh,
Toobo, Otienoo-, quienes le transmitieron sus costumbres y creencias
con toda naturalidad. La autora desea transmitir en este libro su
fascinación por África y por sus gentes. Y lo hace con un estilo
evocativo y poético que suaviza en ocasiones las duras experiencias
que está transmitiendo. No quiere Markham contar su autobiografía,
pues los detalles personales e íntimos apenas aparecen en un relato
volcado hacia el exterior y hacia las sensaciones que ha dejado en
ella, una mujer muy independiente, su enriquecedora experiencia
africana.
Al oeste con la noche
Beryl MarkhanLibros del Asteroide. Barcelona (2012). 314 págs. 21,95 €. T.o.: West With the Night. Traducción: Miquel Izquierdo
No hay comentarios:
Publicar un comentario