lunes, 1 de abril de 2013

“Bajo una estrella cruel”, de Heda Margolius Kovály


 
Heda Margolius Kovály nació en Praga en 1919 en el seno de una culta y conocida familia de judíos. Dos años después del inicio de la Segunda Guerra Mundial, y con Checoslovaquia ya ocupada por las tropas nazis, comenzaron en Praga las persecuciones y deportaciones de judíos. “Si todo comienzo es duro, el comienzo de la desgracia lo es todavía más”, escribe casi al inicio de estas memorias. Heda y su familia fueros trasladados al gueto de Lodz, en Polonia. Allí fue testigo del horror, de la injusticia y de la arbitrariedad. Sistemáticamente, los judíos iban siendo aniquilados, utilizados como mano de obra de usar y tirar en unas condiciones ya muy conocidas gracias a los numerosos testigos que se han publicado sobre la vida en los guetos y en los campos de concentración. Heda recorrió varios de ellos; en uno de esos viajes, fue separada de su familia, a la que nunca volvería a ver. Más adelante, en uno de esos traslados, consiguió fugarse con un grupo de compañeras y en un peligroso viaje de regreso volvieron a Praga.

Pero el recibimiento fue demasiado frío. “Hasta ese momento –leemos- solo había tenido que enfrentarme al sistema policial de un régimen fascista. Ahora tenía que enfrentarme a enemigos peores: el miedo y la indiferencia de la gente. (...) Ahora buscaba un ser humano cuya humanidad fuera mayor que su miedo”. Y es que la sospecha se había instalado en la población, y cualquier persona de acoger a prisioneros o judíos estaba poniendo en serio peligro su vida. Al final, la resistencia, muy activa en los meses finales de la guerra, se hace cargo de ella. Cuando acaba la guerra, se reencuentra con Rudolf, su antiguo novio, también judío, y contraen matrimonio a la vez que en Checoslovaquia se consolida con fuerza el Partido Comunista, ayudados por el prestigio del régimen soviético y su eficaz propaganda. A Heda no le satisface el devenir de los acontecimientos ni los discursos ni actitudes del Partido Comunista, pero animada por su marido, intelectual y ferviente comunista, se afilian al Partido. Pronto comprueba, sin embargo, cómo el comunismo desprecia la democracia y cómo en nombre del bien común se eliminan las libertades individuales. Heda salpica su dramático relato vital con inteligentes reflexiones sobre la política, el comunismo y la sociedad checa en aquellos años.

Rudolf, un trabajador incansable y de ideas férreas y sólidas, fue nombrado Secretario de Estado de Comercio, aunque pronto se torcieron las cosas, pues fue detenido y condenado a muerte en un juicio en el que fueron condenados un buen número de dirigentes del Partido. A partir de ese momento, Heda, gravemente enferma además, fue despreciada de manera generalizada por todos sus vecinos y amigos. “Para entonces, me había convertido en una leprosa, alguien a quien cualquiera que apreciase su propia vida tenía que evitar”.

El libro continua con el relato de las adversidades que sufrió en esos años y su lucha personal por conseguir que se anulase el juicio contra su marido y se le declarase inocente, deseosa de recuperar así su buen nombre. Heda acaba sus impresionantes memorias en 1968, con la descripción de la Primavera de Praga y la represión soviética de las ansias de libertad. Un magnífico libro que forma parte ya de esa biblioteca de la barbarie y el horror sobre los crímenes cometidos por el nazismo y el comunismo.


Bajo una estrella cruel
Heda Margolius Kovály
Libros del Asteroide. Barcelona (2013)
278 págs. 17,95 €.

No hay comentarios:

Publicar un comentario